
Hay dos fuentes, está la sabiduría del mundo y la sabiduría de Dios.
La sabiduría del mundo nos ayuda a operar en este mundo, como administrar un negocio, operar una máquina, organizar un equipo, etc. Es, en el mejor de los casos, solo práctico. En Cuanto al la piedad y asuntos eternos, es nada más locura.
1 Corintios 3:19-20 Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues escrito está: El prende a los sabios en la astucia de ellos. 20 Y otra vez: El Señor conoce los pensamientos de los sabios, que son vanos.
Sabiduría de Dios
• Está en Jesucristo
Podemos aprender de las experiencias que tenemos y así ganar algo de sabiduría, pero si queremos tener la sabiduría de Dios que discierne todos los aspectos de la vida, incluyendo el camino eterno y celestial, debemos recibir a Jesucristo. Él fue hecho para nosotros sabiduría.
Cuando me casé con Natalia me convertí en su esposo, no cambié en Esencia, pero cambié en lo que era para ella. Esto es lo que Dios hizo con Jesucristo, lo hizo sabiduría para nosotros. Aquellos que lo reciben la sabiduría de Dios a través de Él.
• Requiere Fe
Naturalmente, confiamos en el entendimiento que tenemos en nuestra mente y corazón. Cuando enfrentamos problemas, naturalmente obtenemos respuestas y dirección de nuestro entendimiento, pero cuando queremos operar con la sabiduría de Dios, no debemos reaccionar como lo haríamos naturalmente, sino detenernos y preguntarle a Dios antes de reaccionar.
• Requiere Madurez
La sabiduría viene de Dios, pero a medida que maduramos en la fe cristiana, recibimos más y más de ella y está dentro de nosotros como si realmente fuera de nosotros, pero cuando la reclamamos como nuestra, terminamos perdiéndola nuevamente. ¿No es humanista y, por lo tanto, la mayoría siempre se atribuye a Dios?
Esto se describe muy claramente en
Si quieres ser sabio, dedica tiempo a la Palabra de Dios, a la oración y camina de cerca de Dios. Madurarás cada vez más en tu fe y te convertirás en una persona sabia.
